Nada se compara con tener tu propio auto en el que te puedas transportar y desplazar sin depender de alguien más a la hora y el día que tu quieras, sin embargo, también es una gran responsabilidad en muchos sentidos.
Tener tu propio auto significa dejar de vivir la vida al límite y medirte en el consumo de alcohol, así como respetar los señalamientos de tránsito que implican los límites de velocidad, entre otras cosas.
Además de eso, poco se habla (abiertamente) de los gastos que conlleva tener un auto propio, desde la licencia, la compra, el seguro hasta el mantenimiento y la gasolina.
Nada se compara con manejar tu auto propio mientras escuchas tu música favorita y para que eso no se convierta en una preocupación, aquí te dejamos una guía para reducir gastos del mantenimiento de tu auto.
Calcula los kilómetros
Antes de comprar un auto, debes de considerar los kilómetros que planeas recorrer, pues esto te ayudará a saber cuánto combustible vas a usar a diario o periódicamente.
Por lo general, una regla es que si vas a recorrer aproximadamente 15 mil kilómetros al año, te conviene comprar uno que sea de gasolina. En cambio si calculas más de 25 mil kilómetros al año, entonces, te conviene más uno de diésel (el único inconveniente es que esos, son más caros).
¡Ojo con la conducción!
La conducción también es muy importante en cuanto al estado de tu auto, por lo tanto, es indispensable saber que si no lo estás usando, debes mantener el motor apagado; evita los arrancones bruscos y recuerda que mientras tengas una velocidad uniforme gastara menos combustible.
No uses aire acondicionado
Aunque hay momentos en los que usar el aire acondicionado es indispensable en la Ciudad de México (por la inseguridad), la recomendación es no usarlo, a menos de que sea muy necesario.
En tiempo de calor es mejor llevar las ventanas abiertas, mientras que en temporada de frío es mejor que te abrigues bien a prender la calefacción.
Ten en cuenta la gasolina
Lo sabemos, la gasolina ya no baja de 20 pesos, así que procura comparar precios en las distintas gasolineras cerca de los lugares que frecuentas para saber cuál te conviene más. Una recomendación es comprar la gasolina por litro y no por pesos.
No dejes el mantenimiento para el último
El mantenimiento de tu auto no es un lujo es una necesidad y debes hacerlo periódicamente, no esperes a que tu auto te pida a gritos ir al taller, eso podría significar un gasto mayor que se te puede salir de las manos.
Muy importante: Recuerda que si tu auto está en buen estado, tu bienestar también (y no solo el financiero) sino que nos referimos al físico, pues así no te arriesgas a algún accidente automovilístico que podría ser mucho peor.
Si tienes en cuenta estas recomendaciones en cuanto al mantenimiento de tu auto, tu cartera no se verá (tan )afectada y lo agradecerá, además de que tu vida no estará en riesgo.